Historias para contar

Las campanas traicioneras

Había una vez unas campanas que estaban colgadas en una iglesia. Un día se cansaron de estar solas y se fueron a otro campanario, y ahí se encontraron con muchos amigos que no las abandonarían, en ese momento las dos campanas se sentían muy felices.
Habían pasado tres meses y las dos campanas comenzaron a extrañar a los habitantes del pueblo que las tocaban cada siete días. Ellas decidieron ir a visitarlos pero, cuando llegaron se encontraron con una sorpresa, la iglesia había comprado tres campanas. Se enojaron mucho y les preguntaron por qué habían comprado tres campanas nuevas. Los habitantes del pueblo respondieron que las habían cambiado por que los habían traicionado, abandonándolos por tres meses y necesitaban otras campanas para la iglesia.
Muy tristes se fueron del pueblo y volvieron otra vez al otro campanario. Se pusieron a llorar y aprendieron la lección, de no traicionar a sus amigos por más que se sientan solas.

Brandon Carriso